Existen 6 fases en un proceso de coaching profesional. El propósito de esta entrada del blog es ilustrar estas diferentes etapas y explicar el papel del coach durante cada una de ellas.
Cuando se trata de coaching, mucha gente piensa que se trata de un enfoque único para todos. Es algo similar a otras dudas que surgen: ¿se escribe couch o coach? ¿Es lo mismo coach y entrenador?
Sin embargo, esto está lejos de la realidad, pues un proceso de coaching en realidad es complejo. Más allá de ser una conversación, existen ciertas fases que hay que abordar dentro de un método.
Analizando el proceso de coaching como travesía en coche que lleva a un cliente de un punto A, a un punto B, es importante que el coachee entienda lo que puede esperar en el camino.
En esta entrada del blog, exploraremos las 6 fases en un proceso de coaching y discutiremos lo que sucede durante cada una de ellas.
Viendo de forma análoga el proceso de coaching profesional como una travesía, es posible comprender los detalles específicos de dicho viaje.
¿Cuál es la diferencia entre el proceso y método de coaching?
Antes de comenzar, es importante diferenciar entre un proceso y método de coaching.
Como sustantivos, la diferencia entre proceso y método es que el proceso es una serie de eventos para producir un resultado, especialmente en contraste con el producto. Es decir, es el conjunto de elementos que interactúan entre sí para lograr algo.
Veamos un ejemplo, existen varios procesos en coaching para explorar el presente. Por un lado, un coach puede trabajar con la herramienta SPIB para elevar los niveles de conciencia del reto o problema que experimenta un cliente en su situación actual.
También puede aplicar la Rueda de la Vida para ver cómo interactúan diferentes áreas de la vida de un cliente haciendo uso del coaching para el equilibrio de vida.
Los procesos de ambos elementos interactúan entre sí para clarificar la situación actual de alguien.
Esto es un resultado, no el producto final del coaching. No obstante, solo representan una de las etapas del trabajo de un coach a través del Método de Coaching Directo o el Método GROW.
En este caso, los procesos para SPIB y Rueda de la Vida se enfocan en la Definición de Directo o en la Realidad de GROW.
Es así como el método es la forma mediante la cual un coach completa su tarea; es la manera en que hace coaching. Es la guía detallada que muestra secuencial y ordenadamente cómo un coach realiza su trabajo.
Las 6 fases en un proceso de coaching profesional
Según Wanpen Visanbuchanee, Professional Certified Coach de la International Coaching Federation (ICF), la mayoría de la gente conoce el método o modelo GROW de coaching que mencioné arriba. También mencioné el método de Coaching DiRECTO, el que enseñamos en nuestros programas de Certificación de Coaching.
Pero a partir de su experiencia, descubrió que cuando se maneja el proceso de coaching, hay aún más pasos para garantizar el método completo, especialmente para un coach relativamente nuevo.
Podemos decir que el T- COACH es un proceso completo que está alineado a las competencias clave establecidas por ICF. Aquí están los pasos del proceso.
T – TRUST: Confianza
La confianza es uno de los factores más importantes para crear una sociedad entre coach y cliente.
De acuerdo a las 8 nuevas competencias de ICF, los coaches colaboran con cada cliente para crear un ambiente de apoyo y seguridad que les permita compartir libremente.
El desarrollo de la confianza puede darse a través de:
Mostrar signos de respeto. El coach debe demostrar respeto por la identidad cada cliente, sus percepciones, estilo y lenguaje, y adaptar su estilo coaching a cada cliente en particular. Además, necesita reconocer y respetar los talentos, los descubrimientos y el trabajo únicos de cada cliente dentro del proceso de coaching.
Mostrar signos de integridad. Un coach debe asegurarse de haber explicado al cliente qué es coaching y asegurarle que todas las conversaciones son seguras y confidenciales.
Crear confianza genera una atmósfera positiva para el proceso porque ayuda al cliente a disminuir los sentimientos de nerviosismo, incomodidad y miedo mientras lo prepara para el próximo paso en el proceso de coaching.
C – CLARITY: Clarificar
Es común que un cliente inicie la conversación con muchos problemas en mente. También puede ser que tenga muchas opciones u objetivos para abordar.
Ambos escenarios pueden dificultar que un coach comprenda el problema o el objetivo real del cliente.
Por lo tanto, parte del proceso consiste en usar el coaching para diseñar el futuro a partir de clarificar la situación actual.
Es por ello que un coach busca la forma de facilitar cómo crear una visión personal del futuro.
Por lo tanto, el proceso de clarificación se logra a través de lo siguiente:
- Ayudar al cliente a comprender claramente la situación actual y la visión a futuro.
- Verificar que tanto el coach como el cliente tengan un entendimiento mutuo del reto o problema, así como del objetivo. Para eso, los coaches tienden a hacer uso de preguntas cerradas que le permitan confirmar.
Por ejemplo, un coach diría: Entonces puede entender que te preocupa X y lo que quieres lograr es Y, ¿es así?
O – OBJECTIVE: Objetivo
La mayoría de los coaches pueden estar familiarizados con el paso de «objetivo» en el Modelo GROW o la etapa de resolución del Modelo de Coaching DiRECTO.
Desde mi punto de vista, el objetivo para un proceso es similar a estos pasos, pero resulta ser algo más amigable y general para el proceso de coaching.
En el caso de la fase del objetivo para el proceso, se trata de definir el alcance final y valor del coaching, esto a nivel de resultado final. Acordar esto permite que el cliente se comprometa y esté dispuesto a cooperar.
Para cumplir con la fase de objetivo del proceso debe suceder lo siguiente:
Establecimiento de un acuerdo. Aquí, el coach aclara las condiciones de trabajo que regularán el proceso a través de un contrato escrito que asegure el entendimiento mutuo del coaching.
Establecimiento de objetivos. El resultado final del proceso debe ser medible, muy específico, lograrse al final del proceso y para cada sesión en términos de tiempo, debe ser alcanzable en función de los recursos disponibles y significativo.
Al formular objetivos bien definidos para el proceso, el coach ayuda al cliente a definir un alcance para lo que será la inversión. Esto permite que al final de la sesión se pueda verificar si el cliente logró el objetivo o no, además del retorno de inversión sobre el trabajo realizado.
A – ANALYSIS: Análisis
En esta fase, el coach utiliza sus habilidades de coaching y herramientas de forma más precisa para ayudar al cliente a comprender claramente los diferentes aspectos del método de coaching. Es aquí donde entramos en los específicos del proceso.
Desde el Modelo de Coaching DiRECT, entre los puntos clave del análisis está:
- Definir la visión del proceso y situación actual.
- Investigar opciones de acción.
- Resolver un resultado significativo a lograr.
- Emprender la acción a partir de un plan.
- Cambiar hábitos de pensamiento y comportamiento.
- Transitar hacia el logro del resultado.
- Obtener resultados a lo largo del proceso y medir el ROI (Retorno sobre la inversión) del proceso.
C – COMMUNICATION: Comunicación
La comunicación como parte de un proceso de coaching consiste en escuchar, preguntar, ayudar al cliente a contar historias y reflexionar sobre lo compartido.
Comunicar con efectividad es una de las competencias de un coach profesional. A continuación, vamos a ahondar en los aspectos específicos de la comunicación:
Escucha activa
Un coach debe enfocarse en lo que cada cliente está y no está diciendo para comprender plenamente lo que se está comunicando en el contexto de la realidad de cada cliente.
Evocar conciencia
Un coach facilita el descubrimiento y el aprendizaje de cada cliente mediante el uso de herramientas y técnicas tales como: preguntar poderosamente, el silencio, metáforas o analogías.
H – HAVE & HOW TO: Tener y Cómo
Hasta el momento, gracias a las fases previas del proceso de coaching, el cliente ha adquirido conciencia de sí mismo, ha entendido más sobre su momento actual y debe haber descubierto una posible solución a su situación.
Sin embargo, el coach todavía tiene que ayudar al cliente a relacionarse con los recursos que tiene o necesita para hacer su recorrido.
Esto lo puede hacer facilitando un proceso de reflexión sobre el tener y el cómo de la siguiente forma:
- ¿Qué recursos o habilidades tiene el cliente?
- ¿Qué recursos o habilidades va a necesitar?
- ¿Qué opciones tiene el cliente?
- ¿Cómo puede seleccionar la opción correcta?
- ¿Cómo puede alcanzar el objetivo?
- ¿Cómo puede emprender la acción con confianza?El proceso de coaching es un viaje que ayuda a los clientes a alcanzar objetivos específicos. Las seis fases del proceso de coaching son: análisis, comunicación, tener y cómo tener, establecimiento de un acuerdo, establecimiento de objetivos y consecución de la meta. Para lograr la meta, el cliente debe estar de acuerdo con las condiciones de trabajo y establecer objetivos medibles. El coach utiliza su
Al seguir el modelo T-COACH, el entrenador se asegura de mantenerse dentro del proceso y llevar el resultado al cliente.
Reflexión final
Ya sabes que el proceso de coaching se refiere a la serie de eventos que le permiten al coach producir diferentes resultados, especialmente en contraste con el producto final que se logrará a través del método de coaching.
Te he mostrado los diferentes elementos que deben interactuar en un proceso de coaching para producir resultados en las diferentes etapas del método.
Al seguir el proceso T-COACH, como coach te aseguras de mantenerse dentro del proceso y garantizas resultados a lo largo de las diferentes etapas de cualquier método. Esto es vital para triunfar como coach cuando ofrezcas servicios de coaching profesional para empresas y particulares.